La contingencia sanitaria, que ha reducido hasta en 70% la movilidad de las personas según datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), detonó nuevas necesidades y servicios. Uno de ellos ha sido la entrega de comida, productos y medicamentos a domicilio. Una opción que han tenido que empezar a ofrecer los restaurantes, fondas, tiendas de barrio, farmacias, tintorerías y lavanderías para poder seguir distribuyendo sus productos y generando ingresos.

El fabricante de vehículos Nissan, que durante 30 años produjo en la planta de Morelos el modelo flotillero más vendido en el país, el Tsuru, ahora está adaptando otro de los vehículos producidos en la misma planta, el March, para ofrecer una opción de movilidad a los pequeños negocios.

El March es un hatchback subcompacto que, tras la salida de Tsuru y Tiida del mercado, se convirtió en uno de los modelos de entrada de la gama del fabricante japonés. Con este modelo, Nissan atendía, sobre todo, a consumidores jóvenes en busca de su primer auto. Pero ahora, el fabricante japonés ha lanzado una versión cargo diseñada para poder transportar productos.

A diferencia del modelo para pasajeros, la versión cargo, que cuesta 180,700 pesos, no tiene banca trasera. Gracias a esto, la pequeña cajuela que tiene la versión original amplía su volumen de carga de 1.23 metros cúbicos y a 250 kilos. Esta nueva apuesta cuenta con un motor de 1.6 litros, cuatro cilindros y 106 caballos, que, según Nissan, ofrece un rendimiento de combustible combinado de 16.9 kilómetros por litro de gasolina.

“La estamos vendiendo mucho [la versión cargo] a empresas que están haciendo entregas a domicilio. El coronavirus no solo está revolucionando la forma en que vendemos los coches, sino incluso el uso que se les da”, dice José Román, CEO de Nissan Mexicana.

El fabricante japonés ofrecerá el modelo bajo un esquema de arrendamiento o con crédito tradicional. Aquellas empresas interesadas en adquirir más de una unidad podrán acceder al programa Fleet Solutions, que ofrece soluciones a los clientes flotilleros. “Estamos dando facilidades de compra: si la gente requiere un coche ahora lo puede tener y empezar a pagarlo a finales de año, en octubre, noviembre o incluso en diciembre”, dice Román.

Por ahora, Nissan echará mano de los inventarios que tiene del modelo, mientras reanuda la producción de vehículos en su planta de Morelos el 1 de junio. Durante abril, el fabricante japonés comercializó, de forma remota, casi 7,000 unidades, de las cuales 1,328 fueron del modelo March, según datos de Inegi.

“Dicen que en las crisis hay que ver las oportunidades. Si bien la situación está dura [las ventas de vehículos cayeron 64.5% en abril] creo que buscando podemos encontrar oportunidades para hacer negocios”, dice Román.

Por Ivet Rodríguez | Vía expansion.mx

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