Tras el impacto devastador del huracán ‘Otis’ en la Costa Grande de Guerrero el pasado 25 de octubre, las fundaciones Carlos Slim y Telmex Telcel han desplegado una notable operación humanitaria para socorrer a la ciudad de Acapulco. Con una entrega que supera las 26 toneladas de ayuda, estas organizaciones han respondido a la emergencia instalando ocho plantas potabilizadoras para abordar la carencia crítica de agua limpia en la región.
El huracán dejó a miles de personas en colonias populares sin hogar y afectó la infraestructura, generando una urgente necesidad de servicios básicos, como la electricidad y el agua. Ante esta situación, las fundaciones han canalizado su ayuda a través de un ejemplar esfuerzo coordinado, entregando más de 4.000 toneladas de despensas, 4.000 colchonetas, la misma cantidad de cobertores y 8.100 galones de agua.
Además de este apoyo esencial, la empresa Telmex ha adoptado medidas excepcionales para respaldar a los clientes de Acapulco. Durante los meses de noviembre y diciembre, los residentes no enfrentarán cargos adicionales en sus tarifas, aliviando la carga económica en un momento crítico. Asimismo, la compañía ha habilitado diversos puntos de acceso gratuito a internet y estaciones de carga de celulares en lugares estratégicos de la ciudad. En sus tiendas locales, se ofrece acceso gratuito a wifi, brindando una conexión esencial para la comunicación y la coordinación de esfuerzos de recuperación.
Por otro lado, Telcel, la subsidiaria de telefonía móvil de Telmex, ha anunciado medidas para mantener a la población de Acapulco conectada. Hasta el 10 de noviembre, se ofrecerán llamadas y SMS ilimitados, así como el uso sin restricciones de WhatsApp. Además, los usuarios de prepago recibirán 400 megabytes de datos, mientras que los clientes postpago disfrutarán de dos gigabytes para garantizar la continuidad de la comunicación en momentos críticos.
En este contexto de solidaridad y apoyo, las fundaciones Carlos Slim y Telmex Telcel no solo entregan ayuda tangible, sino que también demuestran un compromiso a largo plazo con la reconstrucción de Acapulco. Su intervención no solo se limita a la atención inmediata de las necesidades básicas, sino que también abarca iniciativas que contribuyen a la recuperación integral de la comunidad.
