Las exportaciones de México están en camino de experimentar un auge significativo, alcanzando los 80,000 millones de dólares para el año 2027, impulsadas por la creciente tendencia de nearshoring o relocalización de cadenas de producción. Este pronóstico optimista surge de un estudio presentado por Grupo Hi-Tec, una destacada organización especializada en manufactura.
El informe delineó un escenario base que anticipa un crecimiento anual del 2.6% en el Producto Interno Bruto (PIB) de México de 2022 a 2027. Asimismo, se esbozó un escenario optimista con un crecimiento del 3.7%, basándose en análisis exhaustivos de datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Banco Mundial, el Buró del Censo de Estados Unidos y la firma Análisis Lens.
Los sectores clave que liderarán este impulso económico son electrónicos, electrodomésticos, maquinaria y otras manufacturas, proyectando capturar el 65% de los beneficios generados por el nearshoring, según destaca el estudio de Grupo Hi-Tec.
La geografía económica de este fenómeno revela que el 57% de las oportunidades se concentran en ciudades estratégicas como Ciudad Juárez, Monterrey, Tijuana y Reynosa, ubicadas en el norte del país. Además, se prevé un impacto significativo en las zonas metropolitanas de la Ciudad de México y Guadalajara.
«Aunque algunas áreas están más desarrolladas que otras, existe una clara oportunidad para que pequeñas y medianas empresas se integren en la cadena de suministro de grandes corporativos».
Luciano Dorio, director del Grupo Hi-Tec.
Durante los primeros 11 meses de 2023, las exportaciones mexicanas experimentaron un alza del 2.9% interanual, alcanzando los 543,762.1 millones de dólares, según datos del Inegi. Este crecimiento robusto confirma la posición estratégica de México como uno de los principales beneficiarios del nearshoring, un fenómeno donde las empresas trasladan sus operaciones más cerca de sus mercados clave, especialmente desde Asia hacia Norteamérica.
En este contexto, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) estima que la inversión extranjera directa (IED) superó los 40,000 millones de dólares en 2023 gracias al auge del nearshoring. Analistas coinciden en que este fenómeno no solo impulsa las exportaciones, sino que también fortalece la atracción de inversión extranjera, consolidando la posición de México como destino preferido para la producción cercana a los mercados consumidores.
Por otro lado, el Grupo Bursátil Mexicano (GBM) proyecta que el nearshoring contribuirá al crecimiento del PIB mexicano en aproximadamente 45 puntos base. Se espera que esta contribución se materialice mediante la atracción de 9,000 millones de dólares en inversión fija bruta, con un enfoque significativo en la región norte del país.
El nearshoring emerge como un motor imparable para las exportaciones mexicanas, redefiniendo la dinámica económica y consolidando a México como un jugador clave en la cadena de suministro global. Con proyecciones alentadoras y un impacto positivo en diversos sectores, el país se posiciona estratégicamente para capitalizar las oportunidades generadas por esta tendencia que redefine los límites geográficos de la producción y la exportación.